viernes, 17 de febrero de 2012

Esta es la razón por la cual no escribo seguido.

Hace mucho que no escribía absolutamente nada, no en este blog, ni en ningún lado. Excepto en mis apuntes. Pero tampoco es del todo preciso, están llenos de frases ajenas, frases que me gustan o que me hacen doler, a veces es casi lo mismo. Hasta el día de hoy no se exactamente porqué lo hago, pero no puedo evitarlo, ningun apunte mio puede ser tal sin alguna frasesita que no tiene nada que ver con el tema, en alguna esquina, en algún rincón...


Hace mucho que no escribo en ningún lado. Cada vez menos, y me voy olvidando los signos, las comas, si es con "v" o "b" con "c" o "s", me como los acentos (eso siempre lo hice, algo en los acentos hay que me incomoda mucho).
Me aterra no saber que decir, no querer hacerlo, no saber exactamente si es lo uno o lo otro, y lo que es peor escribir ahora mismo de eso me parece insignificante y aburrido. No se ni porque estoy escribiendo esto, no lo planeé, no sé, creo que tan solo vi el tiempo que había pasado desde la ultima vez que deje siquiera frases.
Nada ha cambiado demasiado, yo he cambiado, la gente alrededor ha cambiado, por eso todo sigue igual. No se si me explico. Creo que no, pero no importa.
Asi que seguimos viviendo, algunos dolores resucitaron, algunas batallas decidí  perderlas injustificadamente, de otras salí victoriosa, algunas personas decidieron que era hora de irse "al barrio que hay detrás de las estrellas", y no pude ni quise refutarles, si tenian su derecho. Algunas lo usaron injustamente. Tan solo pude decirles: mi vida, no hay derecho.
También hubo un despertar súbito, sorprendente, aún no se de donde vino, aún no se que hace aquí, tan solo puedo decir que estoy maravillada.
Mientras escribo estó es tan claro que me golpea en la cara: estoy escribiendo desde ese despertar, siendo costurera de mis jirones, y nose cuantas analogías más, solo se eso. Algo ha cambiando. Ojala sea para quedarse.


He dicho.

Es bueno estar de vuelta.